Las semillas de calabaza le proporcionan al organismo dosis saludables de magnesio, 37% de la cantidad diaria recomendada. El magnesio desempeña un papel fundamental en la tensión arterial, la salud de los huesos y en el descanso nocturno.
Son también una buena fuente de vitamina E, un antioxidante que protege las células del daño causado por los radicales libres, mejora la función del sistema inmunitario y reduce la inflamación.
Aporta proteínas, fibras y pocos hidratos de carbono. Además la mayoría de sus grasas son polinsaturadas y monoinsaturadas.