Los higos turcos son muy ricos en fibras, que ayudan a regularizar el tránsito intestinal, contribuyen a controlar los niveles de glucemia y son una excelente fuente de potasio. Este mineral es indispensable para la transmisión y generación de los impulsos nerviosos y para la actividad muscular normal. A su vez, interviene en el equilibrio de agua dentro y fuera de la célula.
Las frutas deshidratadas se complementan perfectamente con los cereales para un desayuno completo. Son la pareja ideal si buscamos que la primera comida del día nos aporte grandes cantidades de energía y nutrientes.